España ha dado la bienvenida a más de 64 millones de turistas extranjeros hasta agosto de este año, con un nivel de gasto que ha alcanzado cifras históricas. El gasto medio por turista fue de 1.405 euros durante su estancia, un 5 % más que el año pasado. Además, el gasto diario por persona aumentó un 9 %, alcanzando los 188 euros.
El auge del turismo internacional en España continúa y, como era de esperar, agosto, el mes vacacional por excelencia, no fue una excepción.
Hasta agosto de 2024, España ha recibido un total de 64,3 millones de turistas extranjeros, y el gasto total ha alcanzado los 86.500 millones de euros, lo que representa un aumento del 17,6 % en comparación con el mismo período del año anterior. Estos datos fueron publicados esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En el mes de agosto, España acogió a casi 11 millones de personas, lo que supone un incremento del 7 % respecto al mismo mes de 2023. El gasto de estos visitantes superó los 15.300 millones de euros, un 13 % más que el año pasado.
Reino Unido, Francia y Alemania: los principales emisores de turistas
Entre los países de origen de los turistas que visitaron España en los primeros ocho meses de 2024, destaca el Reino Unido, con casi 12,7 millones de turistas, lo que supone un aumento del 7,8 % en comparación con el año anterior. Francia, por su parte, envió casi 9,2 millones de turistas, registrando un crecimiento del 10,1 %. Alemania también mostró un notable incremento, con más de 8 millones de visitantes, un 9,3 % más que en 2023.
Estos datos subrayan la creciente importancia del turismo internacional en la economía española, con un impacto significativo en diversos sectores como la hostelería, el transporte y el comercio. Las grandes ciudades y las zonas costeras siguen siendo los principales destinos, aunque también ha habido un aumento en la demanda de experiencias turísticas en áreas rurales y menos masificadas.
Auge del turismo de lujo y el gasto de calidad
Una de las razones detrás de estos números récord es el auge del turismo de lujo y de alta calidad, con turistas que buscan experiencias exclusivas y están dispuestos a gastar más durante su estancia. El aumento del gasto diario por persona es un claro indicativo de esta tendencia, ya que no solo se trata del número de visitantes, sino también del tipo de turismo que elige España como destino.
Los sectores relacionados con el ocio, la cultura y la gastronomía han visto cómo se incrementaba la demanda de servicios de alta gama, lo que ha contribuido a aumentar el valor del turismo en el país. Este cambio en el perfil del turista beneficia no solo a las grandes ciudades como Madrid y Barcelona, sino también a destinos más exclusivos y menos conocidos.
Expectativas para el resto del año
Con estos resultados, las expectativas para el cierre del año son optimistas. Se espera que España siga recibiendo una gran afluencia de turistas internacionales, especialmente durante los meses de otoño e invierno, con eventos culturales y festividades que atraen a visitantes de todo el mundo.
La industria turística española ha demostrado su capacidad para adaptarse a las nuevas demandas del mercado y seguir siendo competitiva a nivel global. Los esfuerzos por diversificar la oferta turística, promocionar destinos alternativos y mejorar la calidad de los servicios están dando sus frutos, consolidando a España como uno de los destinos más atractivos y rentables para el turismo internacional.
Este crecimiento del turismo no solo se traduce en beneficios económicos, sino también en la creación de empleo y el desarrollo de infraestructuras que fortalecen la posición de España en el mapa turístico global.
Con una estrategia enfocada en la sostenibilidad y la diversificación, España tiene el potencial de continuar liderando el turismo mundial en los próximos años, manteniendo su atractivo tanto para los visitantes que buscan unas vacaciones de sol y playa como para aquellos interesados en la riqueza cultural y la diversidad de experiencias que ofrece el país